MIMBRE Y RATÁN

MIMBRE Y RATÁN

Si hay una tendencia que ha dominado en nuestras casas desde hace tiempo, es definitivamente el mimbre y el ratán, materiales que vistieron los hogares durante los años 60 y 70 y que hoy han vuelto para quedarse definitivamente. Hoy en día buscamos volver a las raíces, la tradición y lo hecho a mano recobra valor.

Pareciera que hay algo que se ordena en nuestro interior que nos hace sentir en equilibrio y bienestar.

El mimbre y ratán se cosechan de manera sostenible y sus corteza se cortan en finas tiras para después tejerse en patrones y diseños para mobiliario, su resistencia y durabilidad son una de las principales características que han elevado la popularidad de estos materiales. ​​


¿ Cuál es la diferencia entre mimbre y ratán?

El ratán nace de las palmeras trepadoras que crecen en los bosques tropicales del sur de China, India, Filipinas, Indonesia y África. Para lograr darle forma a la hora de crear piezas decorativas, es necesario mojarlo para que sea más flexible y pueda moldearse y anudarse. Es un material perfecto tanto para interiores como para exteriores.

Mientras que el mimbre se obtiene de arbustos de la familia de los sauces en Perú, Brasil y nuestro país, este material es fácilmente manipulable a la hora de conseguir formas redondeadas y entrelazadas. La longitud de las varas de mimbre no suele sobrepasar los 2 metros. Es muy buena la maleabilidad del mimbre, ya que se curva fácilmente. El mimbre va entrelazado, por tanto su acabado es más elástico que el ratán