HISTORIA DE LA CAMA

HISTORIA DE LA CAMA

La historia de las camas es tan antigua como la historia de las civilizaciones .

La cama en Egipto posee las misma forma desde el antiguo Egipto que consistía en un bastidor rectangular alargado de madera o metal, sobre la cabecera de la cama, se colocaba una suerte de arco para colocar la cabeza de manera rígida, y evitar que se desarme el complejo peinado del durmiente. 

Los griegos, y por ende luego los romanos, adoptaron el triclinio, una suerte de cama con la cabecera realzada donde cabían tres personas a la vez. La cama no solo servía para dormir, sino que en ella se recibía , se comía; eran de gran riqueza ornamental, lo que le restaba comodidad. La almohada era gruesa y alta, ya que se dormía en posición de semirreclinamiento. Se dormía siempre con la cabeza mirando hacia el norte, lo que aseguraba una vida larga.

Durante el período románico, aparece el dormitorio por primera vez y dormir se convierte en una cuestión privada, aparece también el somier, que puede ser de madera, cuero o hierro y el dosel para evitar que ingresen insectos y ratones. La cama acompañó a cada estilo según sus características: el Renacimiento con columnas salomónicas , el Barroco atestado de elementos decorativos, líneas limpias y monumentales durante la época del imperio de Napoleón y formas etéreas y orgánicas durante el Art Nouveau hasta los días de hoy.